viernes, 7 de marzo de 2014

AUSENCIA

Cuando no escuches los pájaros,
y las sombras se hayan llevado los verdes,
la brisa traerá un lamento
de risas que no resuenan.
El vino se volverá triste en tu boca,
recordando cuánto te he amado.
Mis caricias cálidas
las traerá el sol del mediodía.
Busca en áquel campo
los besos que te he dado,
me sentirás tan cerca… como áquella tarde.